Seguimos con nuestro Intensivo de Bálsamos Sólidos Vegan. En esta ocasión, vamos a empezar a ver que debemos tener en cuenta a la hora de elegir nuestros ingredientes y cantidades.
Indice
FORMULANDO BÁLSAMOS SÓLIDOS VEGAN
El primer paso en la formulación es pensar en el objetivo de nuestros bálsamos sólidos vegan: para qué es (hidratación, antiarrugas, grietas en los pies…), que parte del cuerpo, tipo de piel y la sensación que deseamos que tenga cuando lo aplicamos. Entonces es cuando seleccionaremos los ingredientes para este fin y las cantidades.
Al seleccionar las mantecas y aceites hay que pensar en que aporta cada uno de ellos, sus propiedades y sensación en la piel. También hay que tener en cuenta la comedogeneidad de los ingredientes, especialmente en las fórmulas para piel grasa
o acneica.
Los bálsamos para verano y bálsamos para invierno La temperatura ambiente influye en el momento de formular una barra. Si se mantiene en casa, la temperatura oscila entre 18 y 26ºC si está aclimatada. Pero si nuestro bálsamo viaja en nuestro bolso, la temperatura puede ser baja en invierno y alta en verano.
Como el punto de fusión está ajustado para la temperatura corporal, un bálsamo sólido vegan formulado y ajustado para el invierno puede ablandarse mucho en verano y al contrario, estará bien en verano pero demasiado duro en invierno.
Si en la composición añadimos aceite de coco o babasú, que son sólidos en invierno y líquidos en verano, los cambios de dureza se notarán más que si añadimos aceites que siempre están líquidos a temperatura ambiente, en verano e invierno.

AJUSTANDO LA TEXTURA DEL BÁLSAMO SÓLIDO
Para conseguir la textura adecuada, se pueden seleccionar primero las mantecas y los aceites. Después se ajusta la dureza con la cera, tanteando. Se puede empezar con una fórmula básica de manteca, cera y aceite a partes iguales y hacer los ajustes para textura y dureza de nuestros bálsamos sólidos.
Las correcciones en este sentido son fáciles, sólo hay que fundir de nuevo y añadir un aceite o una cera si se desea ablandarla o espesarla, respectivamente, después se deja enfriar y se prueba.
Cuando ya se ha conseguido la dureza deseada, se suman todas las cantidades utilizadas y se hacen los cálculos para pasar la cantidad de cada ingrediente a porcentajes, y escribir la fórmula definitiva. Esta es la forma de ajustar una fórmula mediante tanteo.
Lo difícil de este proceso no es conseguir la dureza adecuada, sino la sensación en la piel al aplicarla (que se reparta bien, que no se frene, no se sienta demasiado grasa, o más grasa…). Los bálsamos sólidos vegan demasiado duros cuestan a deslizar y aplicar (hay que frotar más). Se corrigen bajando la cera y subiendo la cantidad de aceites.
¿PARA QUÉ TIPO DE PIEL Y CÚAL ES EL OBJECTIVO DEL BÁLSAMO?
Siempre formulamos seleccionando los ingredientes para cada tipo de piel. Las pieles secas necesitan más hidratación y esto se consigue con mantecas, aceites y ceras que permanecen mucho tiempo sobre la piel. Así la cubren con una capa que frena la pérdida de agua a través de la epidermis (périda transepidérmica de agua). La piel seca necesita que se reponga su capa de grasa que está disminuida.
La piel normal y grasa ya tiene suficientes lípidos, así que seleccionaremos aceites, mantecas y ceras que se absorban más rápidamente y dejan la piel hidratada pero no grasosa.
¿CÓMO SERÁ LA SENSACIÓN AL APLICAR LOS BÁLSAMOS SÓLIDOS?
Aunque todos los bálsamos sólidos son grasos, oclusivos e hidratantes podemos conseguir que se absorban más o menos rápidamente, que tenga una sensación seca o grasa, que se deslicen suavemente o que se frenen al aplicarlas.
La manteca de karite deja una sensación grasa sobre la piel y se frena al aplicarla, en cambio la manteca de cacao es seca, suave y se extiende mejor que la de karite. La de mango es menos oclusiva y densa que las anteriores.
Los aceites con mayor cantidad de ácidos grasos omega 3 y 6 (uva, borraja, frambuesa) son más ligeros y se absorben más rápidamente que los que tienen mucho oleico (oliva, almendras, aguacate) que son más grasos y permanecen más tiempo sobre la piel.
Las ceras también tienen matices sensoriales, cuanta más cera se añade a la fórmula más se endurece y se frena en la aplicación. La cera de soja se derrite y desliza bien durante la aplicación, dejando una sensación seca, polvorienta y no grasa.
La cera candelilla hace barras un poco más rígidas, no pegajosas y con sensación seca, pero es dura y quebradiza. La cera de salvado de arroz es más dura y tiene una sensación agradable y no pegajosa.
Si se quiere bálsamos sólidos vegan con sensación seca elegiremos aceites, mantecas y ceras que tengan esa sensación, si queremos una sensación grasa seleccionaremos los grasos de cada grupo.

¿CÓMO SE SELECCIONAN LAS MANTECAS PARA LA FÓRMULA?
Las mantecas son la parte central de los bálsamos sólidos, así que lo mejor es empezar por elegir la manteca, después los aceites, los activos liposolubles y finalmente la cera para ajustar la consistencia final.
Si se utiliza una manteca dura, necesitaremos menos cera, o una cera menos dura.
HACIENDO PRUEBAS
Como siempre os comento, cuando no sabes muy bien como quedará la dureza y textura es mejor empezar con pequeñas cantidades de 25 o 50 gramos. Así como cada vez que hacemos cualquier prueba. Siempre con menos cantidades. De esta manera vas vas aprendiendo de tus ingredientes, y consigues encontrar tu fórmula definitva que luego podrás reproducir perfectamente en grandes cantidades.
Empieza con una prueba de 30 gramos formulando partes iguales de manteca, aceite y cera. Si sale demasiado dura y no se reparte bien, habrá que ablandarla añadiendo aceite y bajando la cantidad de cera. Puedes hacer una muestra nueva, empezando desde cero, o seguir ajustando la que has hecho.
Como no puedes quitar ningún ingrediente, en el caso que sea dura se añade más aceite. Si sale blanda se añade más cera, más manteca, o una manteca más dura. Puedes tantear, según tus sensaciones, hasta encontrar la textura adecuada.
TEN SIEMPRE TU DIARIO DE FORMULADOR A MANO (ESTE ES PERFECTO). Pesa y anota todos los cambios. Suma los ingredientes utilizados y pasa la fórmula a porcentajes. Ya tienes la fórmula definitiva.
MÉTODO GENERAL DE ELABORACIÓN
Se mezclan las mantecas, las ceras y los aceites en un recipiente y se calientan al baño maría hasta que se fundan. Entonces se retira del fuego y se deja enfriar.
Cuando la temperatura está a 50ºC se añaden los ingredientes termolábiles agitando. Se vierte en el molde y se guarda en el refrigerador durante un par de horas para que fragüe bien y se desmolda.
ENVASADO DE LOS BÁLSAMOS SÓLIDOS VEGAN
Podemos envasar los bálsamos sólidos en papel de aluminio, papel kraft, envase para desodorante en barra o tubo para labial.